Tras el crimen del delivery en Moreno, el gobierno de Axel Kicillof apuntó contra Nación por quita de fondos

Javier Alonso, ministro de Seguridad bonaerense, se refirió al asesinato que sufrió el joven repartidor durante la jornada del jueves y a la delincuencia en la provincia.

PaísRedacción Informate San JuanRedacción Informate San Juan
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Desde la provincia de Buenos Aires se refirieron este viernes al violento episodio que se vivió ayer en Moreno, cuando un delincuente asesinó a un repartidor de 20 años. Lucas Aguiar fue apuñalado tras interceder en una pelea callejera por un robo.

El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Javier Alonso, salió a responsabilizar a la administración de Javier Milei por la quita de fondos. En ese marco, aseguró que si el Gobierno hubiera pagado los $700 mil millones, "se podrían haber comprado 10 mil patrulleros". Y agregó: "Si no nos dan los recursos para invertir y fortalecer nuestra capacidad, y al mismo tiempo tenemos una crisis social que avanza".

kicillof-alonsojpgAxel Kicillof y el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso.

El hecho delictivo se produjo el jueves, luego de que Aguilar interviniera en defensa de un vendedor ambulante que había sido atacado por un hombre armado con un cuchillo. "Es tierra de nadie", fue la advertencia que hizo antes de morir.
Alonso agregó: "Cada cuatro horas patrullamos el 75% del territorio y cada intendente, sea de la oposición o simpatice con uno u otro, mira los patrulleros. No hay ninguna zona liberada"; y en relación a lo ocurrido ayer reveló que la Policía "detuvo inmediatamente" al agresor, identificado como Luis Benítez, de 38 años.
En contraparte, el ministro bonaerense aseguró en diálogo con LN+ que "hay menos homicidios que antes", al mismo tiempo que afirmó que "todo parece que es un descontrol" si se "ponen las cámaras" sobre los crímenes.

Vecinos atacaron la municipalidad por el asesinato del repartidor y hay detenidos

Luego de la conmoción por el crimen de Lucas, un grupo de repartidores se movilizaron a la municipalidad para exigir justicia. Tras arrojar piedras a los vidrios de la sede, la Policía tiró gas pimienta para contener los destrozos y balas de goma al aire.

"Una compañera tuvo que renunciar porque le robaron. Estamos expuestos a esto. Tenemos miedo, no sé si volvemos a casa", expresó con angustia un repartidor según la Agencia Noticias Argentinas. "Me acerqué porque todos los días pasa lo mismo. Entran y salen por la misma puerta los delincuentes", reclamó otro delivery.

A la zona céntrica del municipio continúan llegando manifestantes desde el mediodía y el personal policial armó un cordón en la vereda de la municipalidad. Algunos individuos rompieron un patrullero y también le arrojaron piedras a los efectivos de la fuerza de seguridad.

En una avanzada de la policía, cerca de las 13, realizaron diferentes detenciones de manifestantes en las inmediaciones de la Plaza Mariano Moreno, ubicada a pocos metros de la terminal de trenes de la Línea Sarmiento.

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